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La voz de una mujer

Hace 1 año

"Para ver de nuevo el tema discutido "Sacerdocio de la Mujer”, la auto comprensión de la Iglesia debe orientarse nuevamente en María, debe volver la Iglesia a su Marianidad.


La Sra. Dra. Bárbara Albrecht, ponente para la Labor de Formación Teológica Espiritual, dijo: "Para ver de nuevo el tema discutido "Sacerdocio de la Mujer”, la auto comprensión de la Iglesia debe orientarse nuevamente en María, debe volver la Iglesia a su Marianidad. También en lo que se refiere al servicio que la Iglesia ha de prestar al Mundo, no habrá nada más urgente que aquello. Los grandes resurgimientos espirituales de nuestro siglo sobre todo el Movimiento de Schoenstatt y los Focolares han comprendido esta preocupación. Sobre todo, el Padre Kentenich, como metafísico, teólogo, pedagogo y psicólogo, ha regalado a la Iglesia una imagen del hombre y de la mujer orientado profundamente en el orden de ser. Al mismo tiempo como educador altamente dotado ha demostrado como en la práctica hay que educar los hombres en verdaderos hombres, las mujeres en auténticas mujeres, para mujeres virginales y madres, y finalmente como hay que educar a los sacerdotes para que sean auténticos sacerdotes. Que esta preocupación por la dignidad y futuro de la humanidad, y también por el futuro de la Iglesia de Jesucristo son de vital importancia, lo demuestra en estos días por todo el mundo si gusta como si no gusta. El Santo Padre, el Papa Juan Pablo II. Su imagen del hombre, orientada en el orden de creación y en el orden de redención, su imagen de la mujer, orientada totalmente en María, su comprensión para el sacerdocio y la Iglesia y finalmente su personalidad carismática: Juan Pablo II Padre, educador, sacerdote de la Iglesia universal de Jesucristo para servir a todo el mundo todo esto es, llana y sencillamente parentesco espiritual con la personalidad y obra del Padre Kentenich. Es de desear que la iglesia reconozca pronto este nexo, no por las personas sino por la realización de lo cristiano: para la salvación, alegría y esperanza de la humanidad". Publicado en "Regnum” 1980.